La manipulación

Aquí voy a hablar de manipulación. Hay varias formas de entenderla, pero básicamente se reduce a dos perspectivas, la conspirativa y la estratégica, o la no conspirativa. El tema de la manipulación de la información por parte de un medio de comunicación como El Tiempo ya es cuento viejo, se ha estudiado su papel en las elecciones políticas, en la definición de roles de género, en las decisiones de compra de los lectores, etc. En estos ejemplos intervienen las dos clases de manipulación, la que implica que sin darnos cuenta nos están llevando por el camino por el que los magnates interesados quieren llevarnos, y la que no nos elude, pero por medio de la cual hacemos un pacto implícito con el medio que está poniendo a nuestra disposición la información, el pacto es el de creerle y asumir esa información como parte de nuestro catálogo intelectual, además de hacerle caso cuando nos dice dónde debe estar nuestro dinero.

Esta última forma de manipulación, la que aceptamos porque sabemos que con ella sobrevive el periódico, y ya sabemos: de algo tienen que vivir los medios, conlleva aunque no quisiéramos, la legitimación de la manipulación del tipo conspirativo. Esto ocurre todos los días cuando pagamos por acceder a la información que necesitamos (o que nos han enseñado a necesitar) y no pensamos en, o echamos a un lado el dilema frente al hecho de que el ente capaz de manipular la información para suplir nuestras necesidades es una empresa con ánimo de lucro. Bueno, el resto también se ha estudiado bastante, el periódico es entonces un producto de marketing*, la plata debe venir de algún lado, y si Pepito aporta, Pepito querrá que sus intereses tengan una representación en la información del medio.

*Recordar que El Tiempo virtual está dispuesto a caminar por lo que durante la exposición llamé mentalmente “la delgada línea del meme” para venderse.

Ahora, lo que me pareció más interesante de la exposición de Renata es que la mayor parte de sus aportes tenían que ver con las “necesidades del usuario”, las cuales parecen estar clarísimas y ser inmutables. A partir de eso entendí, y tal vez estoy declarando que el agua moja, que lo ideal para la compañía sería hacer que sus objetivos coincidieran perfectamente con las nombradas necesidades de los usuarios. Y voilà! Ahora tenemos el “debes hacer”, “debes leer” y “debes saber” como la verbalización de la manipulación encarnada en orden . El éxito de ambos tipos de manipulación es que hasta lo que pensamos favorezca lo que los intereses del medio necesitan de nosotros, no como lectores, como compradores.

1 thought on “La manipulación

  1. Jimena

    Bueno. Lo de rotular la labor del periódico o mejor su criterio editorial como una conspiración (plan de manipulación) me parece sesgado y una super simplificación de dinámicas complejas. No desconozco los efectos de la propiedad de los medios en sus agendas, pero se que no se trata de conspiraciones de manipulación de masas, como se creía en la postguerra.

    Like

    Reply

Leave a comment